jueves, 21 de junio de 2012

GIMNASIA CEREBRAL PARA EL VERANO

Ya están aquí las vacaciones y muchas familias buscan alternativas para ocupar las largas horas. Lo principal es que nuestros hijos descansen de la rutina escolar, la sustituyan por otra mucho más lúdica, acorde a sus necesidades y las nuestras. Cada vez son más los campamentos de verano y talleres que se organizan, algunos más asequibles que otros, pero todos son muy buenas alternativas, al menos para ocupar parte de los días en los que muchos padres aún trabajan.

Muchos buscan, al terminar el curso, el apoyo en academias o profesores particulares, sobre todo cuando hay suspensos  de por medio y otras veces porque necesitan una atención especial.

Mi intención no es dar consejos sino aportar mi experiencia, por si alguien indeciso necesita alguna referencia en concreto.

La primera opción que yo tendría en cuenta es la de los campamentos, ya que ofrecen a nuestros hijos experiencias  muy diferentes y enriquecedoras. Los que no pueden o no quieren optar por un campamento más largo, tienen la alternativa de los campamentos urbanos, que te ofrecen la posibilidad de comedor si lo necesitáis. Los niños pasan una mañana estupenda, hacen amigos, deporte, toman el sol, algunos hacen excursiones e incluso incluyen actividades como música, danza, teatro, inglés, etc.




También se organizan talleres más cortitos en museos y bibliotecas muy enriquecedores e incluso algunos son gratis. No dejéis pasar la oportunidad de probarlos, hay muchas maneras de hacer que vuestros hijos mantengan la mente activa. Está demostrado científicamente que el cerebro se desarrolla mejor mientras más cosas diferentes le damos en qué pensar y si es a través del juego y la diversión mejor que mejor. Es bueno retar nuestra mente con cosas nuevas y a nuestros hijos les ayudará cuando tengan que volver a la rutina del cole, les habremos dado herramientas nuevas para afrontar nuevas materias.




A aquéllas familias que deciden apuntar a sus hijos a una academia para recuperar una asignatura les puedo dar mi personal visión ya que yo misma he dado clases de apoyo en verano y me he encontrado con casos muy distintos así que tengo varios puntos de vista en este sentido.

Lo que yo haría antes que nada es sentarme con mis hijos y hacer balance de cómo ha ido el curso: cuántos suspensos llevan, si han trabajado y se han esforzado o bien han estado haciendo el vago y averiguar si pueden tener algún problema que no hallamos detectado todavía. La solución para aprobar no está en castigarles dando clase en verano, a veces es preferible pararse a analizar la situación, encontrar el problema e intentar proporcionarles las herramientas para que afronten el curso siguiente de un modo diferente. Tal vez aprueben a base de machacar en verano, pero si no han superado su problema, el curso siguiente estaremos en las mismas.

Os prometo, en breve, hacer otro post, para ayudaros a detectar esos problemas y cómo afrontarlos. Hoy sólo trato de exponeros las alternativas.

Hay niños, con problemas muy específicos, a los que no les viene mal la ayuda de un profesor particular, pero precisamente porque tienen problemas y ya se enfrentan a bastante durante el resto del año, no deberían de estar mucho rato, con dos o tres horas a la semana debería ser suficiente y para reforzar el hábito y mantener un ritmo constante, el resto de los días realizar actividades en casa pero con una dinámica diferente a la rutina escolar. Hay muchísimas alernativas y recursos didácticos a nuestra disposición que nuestros hijos pueden utilizar de una manera más lúdica. Ya os iré poniendo alguna, pero hoy os propongo una que me encanta, la PUZZLECLOPEDIA, una web llena de acertijos, problemas de cálculo, ingenio, lógica, etc. Está muy chula para grandes y pequeños

http://www.puzzleclopedia.com/


 Pero lo más importante de todo es sin duda buscar la manera de tener la mayor parte de las horas de nuestra agenda disponibles para disfrutar de momentos de disfrute y diversión en familia. Lo mejor gimnasia para el cerebro es aquella que es reforzada por la emocionalidad de nuestras acciones.

Tomemos las vacaciones de verano como un precioso momento para generar vínculos con nuestros hijos, esos lazos afectivos que reforzarán su inteligencia emocional, la que es sin duda más importante por encima de todos los sobresalientes o suspensos que se saquen. 

¡¡¡PONLE EL CORAZÓN AL VERANO!!!

¡¡¡FELICES Y COLORIDAS VACACIONES!!!